sábado, 8 de agosto de 2009

Valentia...


Si ahora eres una semilla, no puedes saber qué podría suceder en tu vida.
La semilla nunca ha conocido la flor.
Y la semilla no puede ni siquiera creer que tiene el potencial
de convertirse en una hermosa flor.
El camino es largo,
y siempre es más seguro no recorrer ese camino porque el trayecto es desconocido,
nadie puede garantizarte nada,
solo tu propio esfuerzo te hará germinar.
Nada puede ser garantizado.
Mil y uno son los riesgos del camino,
son muchos los escollos – y la semilla está segura,
escondida dentro de una dura coraza.
Pero si la semilla lo intenta, hace un esfuerzo,
tira la dura concha que es su propia seguridad y comienza a moverse.
Inmediatamente comenzará la lucha: la lucha con la tierra,
con las piedras, con las rocas.
Y mientras que la semilla era muy dura ,
el brote será muy, muy suave y los peligros serán muchos.
No había peligros mientras eras semilla, la semilla podía haber sobrevivido por milenios,
pero para el brote los peligros son numerosos.
Sin embargo, como brote, comenzarás el camino hacia lo desconocido,
hacia el sol, hacia la fuente de luz, sin saber dónde, sin saber por qué.
Te espera un gran esfuerzo,
pero la semilla posee un sueño en su interior y por eso no puede dejar de moverse.
Este mismo camino es para el hombre.
Es duro, necesitarás VALENTÍA.

Desconozco su autor

3 comentarios:

  1. La valentía es tan necesaria para vivir cada día, a veces se pierde y comienza de nuevo el camino para buscarla. Hoy me has dado valentía amiga. Usaré el poder de mi sueño para salir adelante.

    Abrazos!

    ResponderEliminar
  2. Querida,
    muy lindo lo que publicaste,me gustó mucho!!
    Nuevamente quería agradecerte por el mimo, pasaba contarte que ya lo publiqué y entregué, con tu nombre y enlace, si?

    un abrazo
    c@
    www.carolinamaraboli.blogspot.com

    ResponderEliminar
  3. Es un riesgo que vale la pena tomar! Hay que avanzar cada día, y esforzarnos en crecer y germinar.
    Besitos,

    ResponderEliminar